Había que corregir y entrelazar las historias y atravesarlas por una ciudad y su caprichosa topografía. Había que revivir a los personajes y concederles la utopía de la perfección. Había que inundar y secar un río. Había que refundar Barro Blanco y ofrecerle la posibilidad de escaparse de los dientes negros del olvido.
Volver a Matar a López, Zumbido, El negro corazón de María Luisa y Él abrió la boca y yo salí, son las cuatro novelas que componen la tetralogía Barro Blanco. Cada una de ellas se puede leer individualmente, no obstante, el lector que se atreva a recorrer el camino de estas cuatro historias, será capaz de comprender y disfrutar cabalmente de la fundación de ese fragmento de infierno denominado Barro Blanco.