La calidad de las cosas verdaderamente buenas es una experiencia que trasciende cualquier sentido en particular. Nuestra pasión se refleja tanto en los pequeños detalles como en la enorme diferencia entre nuestros instrumentos de escritura y los productos baratos fabricados en masa. Nuestros diseños nacen de una época en la que la tradición y la artesanía eran sinónimos, y en la que el tiempo parecía avanzar un poco más despacio.
Rescatamos la fascinación que despertaban los bolígrafos Kaweco en aquel entonces y trasladamos esos valores a la actualidad, donde la exigencia y el refinamiento son cada vez mayores.





